Fotografías de embarazo en Sevilla.

Fotografías de embarazo en Sevilla. Pauline y Paolo, con Elisa.

La ilusión de Paulina y Paolo por la llegada de Elisa es, simplemente, la expresión más cercana a la felicidad que podemos entender como seres humanos. Quisieron contar con nosotros como fotógrafos en Sevilla para capturar fotografías de embarazo en Sevilla, donde viven y donde nacerá la pequeña.

Nos desplazamos al Parque del Alamillo con la pareja, justo antes del atardecer. Ellos, su futuro bebé y un precioso dálmata que es uno más de la familia y que no paraba de jugar con nosotros y con la cámara. Como siempre, la luz y la emoción fue la protagonista de nuestras fotografías de embarazo. Como podéis ver en algunas de las imágenes que os mostramos en este post, fue una tarde maravillosa, plena de ilusión, sonrisas y esperanza, todos deseosos de recibir a Elisa, que será recibida con todo el amor que os podéis imaginar. ¡Felicidades pareja!

 

 

El comienzo

“¿De dónde he venido?
¿De dónde me tomaste?”
Esto preguntó el bebé a la madre.

Ella respondió, un poco llorando, un poco riendo,
y apretando a su hijo contra el pecho:

“Estabas escondido en mi corazón como un deseo, mi cielo.
Estabas en mis juegos infantiles de muñecas;
y luego con arcilla modelé la imagen de mi dios cada mañana,
te hice y te deshice en ese momento.

Estabas en el vientre de nuestra divinidad hogareña,
y al adorarla te adoraba a ti.

En mis esperanzas y amores,
en mi vida, y en la vida de mi madre has vivido tu.

En el cuenco espiritual de nuestro hogar fuiste cuidado por siglos.
Y cuando en mi juventud mi corazón abrió sus pétalos,
lo rondabas como una fragancia.

Tu ternura floreció en mi juvenil escencia,
como un resplandor en el cielo, como un amanecer.

El primogénito querido del cielo, mellizo de la luz de la mañana.
Has flotado por la corriente de la vida del mundo
y finalmente te quedaste en mi corazón.

Contemplo tu rostro y el misterio me invade;
tu que a todos perteneces ahora eres mio.
Y por miedo a perderte te abrazo contra mi pecho.
¿Qué magia ha atrapado el tesoro del mundo en estas manos mias?

Rabimdranath Tagore