Fotógrafo de bodas en Torre de la Barca
Las parejas luchan por lo que quieren. Son capaces de moverse de un lugar a otro en busca de su amor, de buscar trabajos en uno u otro lugar, de trasladarse para encontrar lo que tanto quieren. No hay fronteras para ello. Conocimos a Lydia y Ricardo hace ya algún tiempo y tuvimos la oportunidad de poder realizar las fotografías de su prepoda que ya os enseñamos. En esta ocasión, os mostramos las del gran día. Fuimos el Fotógrafo de bodas en Torre de la Barca de esta pareja maravillosa que decidieron darse el “si quiero”.
Todo se celebró en nuestra querida Córdoba, que tantas veces nos ha acogido para capturar imágenes incomparables de la ciudad califal y del amor que se profesan las parejas que allí deciden casarse. Es imposible no recordar las maravillosas vistas que Lydia tenía en el hotel donde decidió prepararse para este gran día. Desde el hotel NH Córdoba Guadalquivir, ella junto a su familia más cercana, se dirigió para encontrarse con su futuro esposo al Alcázar de los Reyes Cristianos, donde en una ceremonia muy emotiva, las emociones y los sentimientos se desbordaron en puro amor.
Para terminar, la pareja y familiares se dirigieron a Torre de la Barca, un maravilloso lugar, en las afueras de Córdoba, para celebrar junto con las amistades y familiares más cercanos tuvieron la oportunidad de celebrar una fiesta fantástica como broche de oro a un día espléndido. Como podéis ver en las fotografías de la boda que os mostramos en este post, nosotros como fotógrafos de boda tuvimos la oportunidad de disfrutar de nuestro trabajo junto a una pareja tan especial.
Si la esmeralda se opacara, si el oro perdiera su color, entonces, se acabaría nuestro amor.
Si el sol no calentara, si la luna no existiera, entonces, no tendría sentido vivir en esta tierra, como tampoco tendría sentido vivir sin mi vida, la mujer de mis sueños, la que me da la alegría…
Si el mundo no girara o el tiempo no existiese, entonces, jamás moriría, tampoco nuestro amor…
Pero el tiempo no es necesario, nuestro amor es eterno, no necesitamos del sol de la luna o los astros para seguir amándonos…
Si la vida fuera otra y la muerte llegase, entonces, te amaría hoy, mañana… por siempre… todavía.
Mario Benedetti, del poema “Por siempre”